El
Canario Yorkshire
Ahora,
el canario York es una de las pocas razas de las de forma y posición que tienen
las mejores características de las que indica su estándar. Los ejemplares de
poca calidad son pocos.
Hace años, en esta misma revista, se
publicaron artículos que afirmaban que el actual modelo
de perfección, conocido con el nombre de Goldwing, había pasado de moda y era
aconsejable trasladar la selección a un nuevo modelo, identificable con el
nombre Roberts.
La representación gráfica era la de un
York con bloque de cabeza, cuello y hombros, pecho de ciencia ficción. Con
razón, la respuesta apropiada tuvo lugar inmediatamente. Hoy, pasó ese episodio
y ya no se habla del modelo Roberts, sino que se ha vuelto al modelo Goldwing en
el que casi se ha alcanzado la perfección en muchos aspectos de dicho modelo.
El York es esencialmente un canario de
forma elegante y refinado. Es una de las razas de la canaricultura más
fascinantes.
Los
sujetos que combinan armoniosamente la forma y la elegancia de su posición,
dejan a quienes los juzgan completamente encantados.
Es algo agradable. De hecho, examinar
la disposición armoniosa de la posición, la forma, la cabeza, el tipo, es
decir, la belleza general de los diversos componentes, proporciona una
sensación de alegría y satisfacción.
Esta raza ahora ha alcanzado niveles
muy altos de selección. La mayoría de los ejemplares expuestos, y en particular
los vistos en el último Campeonato Italiano, confirman estas impresiones mías.
La mayoría de los York presentaban un
gran equilibrio entre posición y forma, y, si una de estas dos características
es inadecuada, la otra también se verá comprometida: la perfección no existe si
la forma y la forma no están en armonía.
Estas cualidades para ser juzgadas correctamente
deben asociarse con una buena preparación para la jaula de exposición.
Los criadores han entendido bien que
para beneficiarse de la tipicidad tienen que cuidar la calidad y condición del
plumaje, que debe estar ajustado y apretado para que se perciba perfectamente
la forma del cuerpo.
La zona de la cabeza, cuello, hombros, puede
tener un plumaje algo más esponjoso, a diferencia de la parte posterior del
tronco y cola, en el que la delgadez particular de estas partes del cuerpo deben
mostrar un plumaje más escaso y apretado.
La estructura del cuerpo, debe recordar
la forma de un cono con la base hacia arriba, y solo un plumaje adherido y puede
delinear esta forma, el ancho restante es la conexión de otros elementos
característicos: cuello, hombros, pecho: estas partes del cuerpo, juntos, dan
forma al bloque. Este requisito exclusivo y típico confiere una apariencia
imponente en la estructura física y se revela una pequeña hendidura entre la
cabeza y el cuello que identifica la nuca.
La notable elegancia le ofrece una cola
larga, ligeramente elevada y armoniosa con la línea de la parte baja del cuerpo.
Esto, que en otras razas constituye un defecto, en el York es una
característica de calidad.
Dado que la posición es una
característica principal, para manifestarse de la mejor manera, debe estar acompañada
de patas fuertes, unidas y medianamente largas y ligeramente flexionado. Se
consideran deficiencias las patas rígidas, las cortas y las que están abiertas
o separadas.
Las patas son un elemento de un grupo
de rasgos externos muy importante para la expresión armónica de la posición.
La posición está regulada por el continuo
movimiento de las patas y dedos que, al apretar y liberar la sección ovoide de
la percha, producen una cierta carga nerviosa. Esto es esencial para resaltar
el temperamento, la tipicidad y la calidad de los rasgos identificables de la
raza en el bloque de la parte superior del pecho (cabeza, cuello, hombros, pecho).
En las exposiciones, solo se observan
regularmente y con frecuencia ejemplares coloreados artificialmente. Los
británicos, además de buen gusto en la creación de la raza, dieron más elegancia
en York al adoptar colorantes artificiales. Con esta técnica las
características son más definidas, elegantes y refinadas.
El año pasado, en Quarto D'Altino, tuve el
placer de enjuiciar un excelente canario totalmente blanco. La rara belleza que
presentaba este canario era extraordinaria. Las características eran muy
típicas, pero sobre todo destacaba el bloque (cabeza, cuello, hombros, pecho) y
la forma del cuerpo que era muy similar a la silueta del cono invertido
Los
Yorks blancos son actualmente poco comunes y encontrar algunos de ellos con
formas adecuadas es bastante raro. Una felicitación para el dueño de tales
canarios es imprescindible.
Italia
Ornitológica. Texto de Enrico Grammatico.
